¿Cómo pinto las habitaciones?
A veces ocurre que nos cansamos de los colores de las habitaciones de nuestra casa y decidimos pintarlas sin pensarlo dos veces. ¡Cuidado! No hagas algo de lo que te puedas arrepentir después, contrasta colores, estudia la habitación y analiza del espacio del que dispones.
Cada habitación dependiendo de la luz que disponga, tamaño, etc. podrá pintarse de un color u otro.
TONOS CÁLIDOS
Cuando elegimos la gama de los tonos cálidos, es decir, amarillos, anaranjados y rojos para habitaciones con poca luz y de tamaño medio conseguiremos que a efectos ópticos la habitación parezca más pequeña.
TONOS FRÍOS
Debemos optar por los colores fríos, en las gamas de los verdes, azules y púrpuras, que consiguen crear la ilusión de que la estancia es más amplia de lo que parece.
Por el contrario si para una habitación de tamaño medio pero con mucha luz optamos por beiges, nacar u otros tonos claros conseguiremos mucha mas amplitud.
Los colores afectan psicológicamente a las personas, por lo que es necesario tener en cuenta la forma y tamaño de la habitación y la idea que queremos transmitir, antes de decantarse por un tono en concreto.
LA FORMA DE LAS ESTANCIAS Y EL COLOR
Otra cosa a tener en cuenta a la hora de pintar una habitación, aparte de su tamaño, es la disposición y la forma.
Una estancia alargada y estrecha puede parecer más amplia pintando las dos paredes cortas de un color más oscuro que las paredes largas.
En cuanto al techo, si es demasiado bajo y da la sensación de ‘aplastar’, nunca debemos pintarlo en colores oscuros o cargados.
El blanco y los frescos tonos azules o verdes claros son la mejor opción para aligerar los techos bajo y proporcionar una sensación de espacio.
La verdad es que la pintura es un elemento decorativo más para cualquier hogar. Con la pintura se puede conseguir dar a las paredes el toque original que cada persona quiera. Además, por suerte hay tantísimos colores, que lo más importante es buscar el que más se ajuste a las necesidades de cada hogar. Colores pasteles, colores vivos, colores blancos, negros… Sea lo que sea, lo mejor es experimentar y probar, para dar con el mejor para cada estancia de la casa.
La pintura transforma espacios. En decoración y bricolaje, es clave. Con colores adecuados, puedes crear ambientes acogedores y personalizados, dando vida a tu hogar con creatividad y estilo.