Como reformar un hotel con encanto (hotel boutique) y no morir en el intento.
Estrategias Ganadoras.
«La fama cuesta».
Y es que mi más reciente proyecto, la reforma del Hotel Restaurante Alcázar en Mula (Murcia), ha estado muy condicionado por el entorno, la existencia de varios interlocutores y la intervención del equipo de obra en la idiosincrasia del detalle constructivo. Pero se está resolviendo, al fin, satisfactoriamente para todos. Eso es lo que cuenta.
Todos los proyectos, al inicio, constituyen un reto. Forman parte de distintas localidades, con diferentes programas de necesidades, para clientes de personalidad propia y demandas concretas. Por eso, con cada nuevo trabajo, ilusión y responsabilidad se solapan, al tiempo que uno se pregunta si ante la reacción del cliente ya fidelizado del hotel, el propietario renegará de tu propia existencia. Con el fin de evitar estas desagradables disquisiciones, me atrevo a compartir con vosotros lo que el proceso del proyecto me ha descubierto:
A priori, conviene «bucear» en el producto y el servicio del hotel.
A lo mejor, antes de plantearse una reforma arquitectónica, conviene un «Pesadilla en la Cocina» en toda regla. Este no era el caso (y que conste que no lo digo porque lo pueda leer media España). El nivel del restaurante del Alcázar es fantástico: combina una estupenda materia prima con el deseo de interpretar y actualizar la tradición.
Así que, eso hice yo también en el proyecto de interiorismo. Empleé maderas y texturas tradicionales con una nueva composición. No tuve más que ahondar en el espíritu del modelo de negocio para rescatarlo y mostrarlo. Al rediseñar la marca con los diseñadores gráficos, destacamos la palabra «restaurante». Apostamos por una tipografía serifa que no huía del pasado del hotel e incidía en una trayectoria de calidad.
Vinilos e Imagen Corporativa del Hotel Restaurante Alcázar. El logotipo refleja una imagen característica de Mula, las sombras de las tejas de las cubiertas proyectadas, tal y como se observa en las imágenes de Mula, realizadas por Andrés García Mellado, de Estudio la Cholepa, diseñadores gráficos y fotógrafos colaboradores de Martínez Vidal Design Office
Pretendíamos trasladar la vocación y dedicación de los propietarios, a un entorno cálido, conseguido con una adecuada temperatura de color y la combinación del blanco y el negro suavizada con la madera, que atenúa el contraste.
He entendido el lugar como un contexto donde los sabores se cocinan con cariño y a fuego lento.
El Hotel Restaurante Alcázar es un icono del pueblo de Mula. Por ello trate de ampliar su público objetivo sin infravalorar a la clientela fidelizada. El uso controlado de iluminación RGB dota de un aire más divertido por las noches a la cafetería, muy transitada de día.
El resultado ha sido el requerido y el éxito se ha traducido en más copas y cervezas servidas, toda una alegría para el propietario.
En una planta de 600 m2 donde resultaba imprescindible ampliar la recepción sin reducir la zona de mesas, se ha optado por potenciar la flexibilidad y versatilidad del espacio con tabiques móviles de vidrio.
El diseño de la zona de la barra, la más rentable hasta el momento, se repitió en el mostrador de recepción, que cambia de uso según la ocasión, para potenciar lo que mejor funciona del hotel (hasta hoy).
Customizar el mobiliario e integrarlo en obra es una forma de «vestir» un recinto con un presupuesto ajustado.
LAS HABITACIONES
En las habitaciones integré el cabecero de las camas como continuación del suelo de tarima de madera, sustituyendo también a las mesitas de noche con un quiebro de apoyo.
Para los estores y vinilos de planta baja, elegí fotografías artísticas de las calles del pueblo para conectar el hotel con su posición geográfica, para reivindicar su procedencia, con el fin de resolver un proyecto representativo de todo un icono.
Mi leitmotiv es descubrir los espacios a través de la experiencia con los cinco sentidos.
La «arquitectura para la foto» no es admisible en un proyecto de Interiorismo comercial o retail.
Se ha de obtener un resultado que mejore las ventas, que represente al propietario, y que empatice con el cliente ya adquirido (si resulta suficiente). Por eso, arquitectos e interioristas, hemos de «tragarnos» nuestro ego para asumir que, tenemos una responsabilidad directa sobre la reactivación de la actividad económica local. No conviene eludirlo para que nos vuelvan a llamar después de terminar cualquier proyecto.
Amparo Martínez Vidal
Arquitecta col. COAMU Nº1441
martinez-vidal.com
@amparocimbra // amparo@martinez-vidal.com
Amparo trabaja en Martínez Vidal Design Office como arquitecta y ha publicado obras a nivel internacional, como el Panteón para un Ingeniero (en Dezeen, ArchDaily, Plataforma de Arquitectura, etc.) .
Especialista en diseño de proyectos de locales comerciales y Retail (Guarderías, Bares, Tiendas de Moda, etc.) , escribe artículos de arquitectura en Shopper Magazine y MurciaEconomia.com y colabora en un programa de radio con una sección de arquitectura.
Podéis ver un portfolio de sus trabajos desarrollados en martinez-vidal.com y seguir su blog de marketing, diseño, retail y arquitectura.
Amparo es uno de los 10 arquitectos más influyentes en redes en España. Siguiéndola en facebook y twitter podréis participar en sus habituales y apasionantes debates sobre arquitectura, interiorismo, Retail, además de otros interesantes temas y conocer a sus muchos seguidores y amigos.